La moda infantil española facturó un 6,9% menos en 2018
La industria de la moda infantil española continua en decrecimiento. En 2018, la facturación del sector cayó un 6,9% respecto al año anterior, hasta los 1.509 millones de euros, según los últimos datos presentados por el panel de consumo Worldpanel Fashion de Kantar. Un descenso en línea con la tendencia de años anteriores y determinado, en gran parte, por la bajada de la natalidad: durante la primera mitad de 2018 se registraron 179 mil nacimientos, un 6% menos que el año anterior. Este hecho afecta de manera muy directa al sector textil, ya que el 12% de la facturación de este proviene de la moda infantil (hasta 14 años).
Este retroceso ha hecho perder al sector trecientos mil compradores y también ha afectado al gasto. A cierre de año a abril 2019, el comprador español de moda infantil ha gastado una media de 125 euros, un 1,2% menos que el mismo periodo anterior, pero un 33,4% menos que en 2009.
Las cadenas aumentan su importancia
Los cambios demográficos han venido acompañados por importantes cambios en la distribución durante los últimos años. Las cadenas, gracias a sus precios más competitivos, han ido ganando relevancia, penalizando directamente al canal tradicional.
Durante el último año, el 74% de los compradores de moda infantil han comprado alguna prenda en las cadenas de moda, que ya concentran el 54,2% del gasto realizado para los más pequeños, lo que hace que se posicionen como un canal de compra clave para los niños frente a los adultos.
Este mayor protagonismo de las cadenas en este público ha estado impulsado por las cadenas generalistas, lideradas por Primark y Zara, que llegan a 3,6 y 2,8 millones de compradores respectivamente, y no por las cadenas especialistas en moda infantil, entre las que destaca Mayoral, con 0,6 millones de compradores dispuestos a pagar un precio medio más alto.
La búsqueda de precio obliga a las cadenas especialistas en moda infantil a competir no solo con las grandes cadenas de moda, si no que también se enfrentan directamente a las cadenas del híper y súper, dónde Carrefour ya alcanza los 2,5 millones de compradores.
En opinión de Rosa Pilar López, Individuals Panel Director de Kantar Worldpanel Division, “Las cadenas generalistas juegan con la ventaja de que son cadenas donde la madre compra también su ropa. Por lo tanto, en un único espacio puede hacer la compra para toda la familia. Factor clave en el momento en el que nos encontramos, ya que la frecuencia de visita y compra ha ido cayendo año tras año.”